jueves, 28 de octubre de 2010

VÍA FERRATA PRIMERA LUNA

VÍA FERRATA
"PRIMERA LUNA"


FICHA BÁSICA

TÉRMINO MUNICIPAL: San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria).
APROXIMACIÓN: Pista de tierra por el cauce del Barranco del Berriel.
TIEMPO DE APROXIMACIÓN: 45 minutos.
LONGITUD DE LA VÍA: 250 m.
TIEMPO EMPLEADO EN LA VÍA: 1 hora.
REGRESO: Por otra pista en Los Cabezotes.
TIEMPO DE REGRESO: 1 hora.
EQUIPAMIENTO: Grapas de hierro, cable de vida de acero en todo el recorrido y algunas cadenas.
EQUIPO IMPRESCINDIBLE: Casco, guantes, arnés de seguridad con baga de anclaje y baga con disipador de energía. Varias cintas express, ocho y una cuerda pequeña.
RECOMENDACIÓN: Que no falte el agua y alguna barrita energética ya que el ascenso por la última vertical es corto pero agotador, sobre todo en verano.
TIPO DE RUTA: Vía Ferrata.

CARTOGRAFÍA



DESCRIPCIÓN DEL ACCESO

Para salir de la rutina de los descensos de barrancos, decidimos desplazarnos a la isla de Gran Canaria a hacer la Vía Ferrata “Primera Luna”, primera y única vía de este tipo que hay en Canarias, situada en el Barranco del Berriel, al sur de la isla.
Para llegar a ella cogeremos la autopista GC-1 dirección al sur, hasta encontrarnos con la Salida 37 que conexiona con la GC-500 que va hacia San Agustín, pasando por el Aeroclub de Las Palmas. En la primera parada de guaguas que nos encontremos hay una pista de tierra que lleva directamente al comienzo de la vía, nosotros dejamos el coche aparcado en este lugar y fuimos caminando.

La pista de acceso pasa por debajo de la GC-1 (i);
riscos de Las Travielas (d).

Pista por el cauce del Barranco del Berriel.

Dicha pista se introduce por una gran explanada muy árida, cruzando la autovía por debajo de un puente en dirección a una cantera situada en el Morrete de las Sardinas, junto a un embalse de agua. Mas adelante cogemos un desvío a la izquierda, dejando la presa a nuestra derecha y recorriendo el cauce del Barranco del Barriel bajo los riscos de Las Travielas, con amplias resbaladeras plagadas de grandes ejemplares de Cardones. El camino es evidente y termina justo debajo de la Montaña de las Tabaibas (416 m.), un enorme risco donde está situada la vía.
Acceso desde el final de la pista a la base de la montaña.

Estando de frente al risco, tendremos que progresar en fuerte ascenso hacia la derecha y buscando su base, hasta encontrarnos en un pequeño llano protegido por Tabaibas donde tendremos que estar atentos a ver la primera grapa. Esta primera parte de la vía la encontramos cerrada por obras de mantenimiento, llevándonos una monumental decepción que estuvo a punto de obligarnos a regresar sin el deber cumplido. Se nos ocurrió buscar el final del escape que tiene la vía hacia la derecha antes de progresar por la parte más difícil; lo encontramos en un saliente rocoso después de buscarlo desesperadamente y decidimos entrarle desde aquí ya que vimos que era viable.

Buscando el escape de la vía principal.
De lleno dentro de la vía en el escape.

DESCRIPCIÓN DE LA VÍA

Comenzamos el descenso por la pared sur que nos dejará en un pasillo paralelo a la base, siempre atado al cable de vida, hasta llegar a un saliente rocoso y progresar agachados unos metros bajo la roca, para encontrarnos con el primer paso muy expuesto, es un tramo aéreo con algo de dificultad donde hay que poner a prueba el vértigo, ya que bajo nuestros pies se abre un inmenso panorama con el cauce del barranco al fondo.

Ramón (i y d) y Francis (c) en los primeros pasos sin dificultad.


Un gran "paseo" aéreo en horizontal por la pared oeste.
David (i y d) y Francis (c) en la horizontal oeste.

Jonay (i) y Alfonso (d) progresando sin dificultad.

Luego una corta vertical ayudados por una cadena bajo grandes Cardones, que da paso a un estrecho pasillo muy expuesto que rodea la pared por la cara oeste y termina asomándonos al paso de mayor dificultad. Es un tramo totalmente expuesto, vertical y muy aéreo que aunque falto de alguna grapa, se salva con algo de esfuerzo, lo mejor en este trayecto es concentrarse en la pared y no mirar abajo porque nos separa una distancia hasta el suelo de más de 150 metros de altura.
Francis (i y c) y Jonay (d) comprobando siempre estar asegurados.

Manolo (i) y Alfonso (d) en uno de los pocos pasillos aéreos
que sirven de descanso.


Ramón y Francis en la vertical final muy vertiginosa.


Manolo (i) y Francis (d) terminando la vertical final.


Jonay progresando por la vertical final
visto desde otra perspectiva.

Pasado éste, la vertical se suaviza hasta coronar un saliente rocoso donde podremos descansar antes de retomar el último tramo sin dificultad. A partir de aquí nos encontramos protegidos por la roca, aunque no hay que separarse del cable de vida y progresaremos sin dificultad hasta coronar la cumbre en la Montaña de las Tabaibas a 416 metros de altitud.

Ramón, Jonay y David (i) en la cumbre.
Todos en la cima final.

El regreso está marcado por unas pequeñas señales amarillas pintadas en algunas rocas que nos lleva a una pista de tierra, sólo hay que seguir ésta en continuo descenso y que nos llevará al punto de origen.

Regreso entre grandes Cardones.


© Texto de Francisco Fariña
francisco_farina@yahoo.es
http://franciscofarina.blogspot.com/

© Fotografías de Francisco Fariña, David, Jonay y Alfonso
.

jueves, 21 de octubre de 2010

GR-131 - ETAPA 5 - EL PORTILLO-DEGOLLADA DE GUAJARA


GR-131 - E5
EL PORTILLO-DEGOLLADA DE GUAJARA


FICHA TÉCNICA

TÉRMINO MUNICIPAL: La Orotava
COMO LLEGAR: Al Centro de Visitantes de El Portillo se llega mediante la carretera TF-24, ya dentro de los límites del Parque Nacional del Teide.
COMIENZO: Centro de Visitantes de El Portillo.
FINAL: Degollada de Guajara (2389 m.).
DIFICULTAD: Medio-Alta.
DURACIÓN: 6 horas.
LONGITUD: 14,2 Km.
PROVISIÓN DE AGUA: En el Centro de Visitantes de El Portillo.
LUGARES DE INTERÉS: Centro de Visitantes de El Portillo. Gran parte del recorrido de la RUTA 4 de Siete Cañadas. Cumbres más altas del circo de las cañadas. Paisajes cautivadores e ideales para la práctica de la fotografía.
ESCAPES HACIA VÍAS ASFALTADAS: La RUTA 30 termina después de más de 4 kilómetros en la carretera TF-24.
TRANSPORTE PÚBLICO: Hay una sola línea de
TITSA que sale desde el Puerto de la Cruz y termina en el Parador de Turismo cuya frecuencia es de una vez al día.
POSIBILIDAD DE ALOJAMIENTO: Dentro del Parque Nacional está prohibido acampar.
POSIBILIDAD DE DIVIDIR EL RECORRIDO TOTAL: En el cruce con la RUTA 30 hay posibilidad de dividir el recorrido, pero no vale la pena porque la distancia hasta la carretera TF-24 en las Minas de San José es de casi 5 kilómetros.
VENTAJAS: Camino señalizado como RUTA 4 (Siete Cañadas) y RUTA 5 (Degollada de Guajara). Recorrido bastante solitario dentro del Parque Nacional del Teide con vistas impresionantes de Las Cañadas, del propio volcán y de los picos mas altos que se elevan por encima del camino, como la Montaña del Cerillar (2364 m.), Montaña de Arenas Negras (2346 m.), Montaña de la Angostura (2382 m.), Roque de la Grieta (2575 m.), Montaña Pasajirón (2529 m.); y las que se elevan mas allá de Montaña Guajara (2718 m.), como el Sombrero de Chasna (2405 m.), el Sombrerito (2328) y el Roque de los Almendros (2523 m.), entre muchas otras.
INCONVENIENTES: En verano puede ser agotador debido a las altas temperaturas, por lo tanto es conveniente empezar la ruta a primeras horas de la mañana. En primavera abundan las abejas. En invierno es necesario tomar otras precauciones porque puede haber nieve y las temperaturas son muy bajas, aunque esto no debe ser necesariamente un inconveniente.
TIPO DE RUTA: Senderismo de larga travesía.


Panorámica desde la Degollada de Guajara.

CARTOGRAFÍA


DESCRIPCIÓN

En la carretera TF-21, unos trescientos metros después del cruce con la TF-24 que viene desde La Esperanza, está ubicado el Centro de Visitantes de El Portillo, centro de información y entrada al Parque Nacional del Teide. Al otro lado de dicha carretera, junto a los aparcamientos públicos, hay una rampa que da acceso a la RUTA 4, denominada Siete Cañadas y a la RUTA 2, Arenas Negras, como asi reza en un panel informativo.
Comienzo de la RUTA 4 en el Centro de Visitantes.

El comienzo del recorrido es por una pista de tierra en suave descenso en la Cañada del Portillo, que discurre entre Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius), Alhelíes del Teide (Erysimum scoparium), Hierba Pajonera (Descurainia bourgaeana) y Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus); enseguida veremos a la izquierda la llegada del GR-131 - ETAPA 4 en forma de senda estrecha que surge del Barranco de la Raya para unirse a dicha pista. Poco después encontraremos hacia la izquierda el comienzo de la RUTA 2, que asciende hacia la Montaña del Cerillar (2364 m.) situada junto al Llano de Maja y luego vuelve a descender por las faldas de Montaña de Arenas Negras (2346 m.), para unirse de nuevo a la RUTA 4. Por supuesto evitaremos dicha bifurcación y seguiremos por la pista, traspasando una valla de hierro y adentrándonos definitivamente en un paisaje de estremecedora amplitud. Por la Cañada del Arrecife del Codeso vamos avanzando junto a las lavas del Volcán del Portillo y mas adelante el camino va cortando perpendicularmente las resbaladeras de un cono volcánico secundario perteneciente a Montaña del Cerrillar (2364 m.), para unos minutos después por un pronunciado descenso llegar al interior de la Cañada del Descanso de las Gallinas, donde encontraremos una bifurcación perteneciente a la llegada de la RUTA 2 que desciende vertiginosamente desde la Montaña de Arenas Negras (2346 m.) y desde donde tendremos la curiosa vista del Risco de las Ventanas, una formación rocosa con una oquedad que llama bastante la atención.

Montaña del Portillo (i); Cañada del descanso de las Gallinas (d).

Cañada de los Chupaderos.

El Teide detrás de Montaña Mostaza.

Luego, después de unas cuantas curvas del camino, llegaremos a la Cañada de los Chupaderos, un enorme llano que se extiende bajo el Risco de los Chupaderos, con vistas sorprendentes hacia la derecha, de Montaña Mostaza (2248 m.), un cono volcánico con un ancho cráter abierto hacia el norte, que se halla bajo la omnipresencia del Teide (3718 m.); también se pueden distinguir el final de la ruta donde se alzan tres cumbres muy importantes como son el Roque de la Grieta (2575 m.), Montaña Pasajirón (2529 m.) y Montaña Guajara (2718 m.), formando una visión espectacular.



Montaña Mostaza junto al Teide (i); Cumbres del Roque de la Grieta,
Montaña Pasajirón y Montaña Guajara (d).

Seguimos el camino por firme llano y pedregoso con largas líneas rectas y siempre acompañado de la vegetación característica del Parque Nacional como las Retamas (Spartocytisus supranubius) y los Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus), si estamos atentos y tenemos suerte podremos ver alguna manada inusual de muflones, animales introducidos en los años 40 como especies cinegéticas para el divertimento de las clases sociales altas de la época.
Bajo el Risco de Chiqueros (2365 m.), penetramos en la Cañada de Diego Hernández, la pista va girando poco a poco hacia el sur acercándose a la enorme pared que forma la amplísima caldera que rodea el Parque Nacional por el sur.


Cañada de Diego Hernández.

El llano es muy amplio y se puede observar, bajo las resbaladeras de los riscos, un afloramiento rocoso que alberga la Cueva de Diego Hernández, un hueco de poca profundidad que se puede visitar y que fue refugio del último de los cabreros que traía sus cabras a pastar por estos lugares. Estos alrededores albergan unas de las pocas poblaciones del endemismo tinerfeño Jarilla de las Cañadas (Helianthemum juliae), un arbusto de pequeñas flores amarillas en peligro de extinción.


El Teide desde la Cueva de Diego Hernández.

El recorrido sigue su curso sin abandonar la pista, por firme arenoso y superficie llana; al terminar la Cañada de Diego Hernández pasaremos junto al Roque de la Carabela, bajo el Risco Verde (2315 m.) y pasaremos a recorrer la Cañada del Risco Verde, donde en breves minutos nos encontraremos con la bifurcación que, hacia la derecha, nos lleva por la RUTA 30 hasta las Minas de San José, por un recorrido que tiene una distancia de mas de 4 kilómetros.



Roque de la Carabela (i); Cañada del Risco verde (d).


Bifurcación hacia la RUTA 30.

Una vez rebasado este cruce nos encontraremos con la Cañada de las Pilas, otra extensa planicie junto al llamado Valle de las Piedras Arrancadas, donde al principio nos llamará la atención un risco descompuesto donde crecen algunos ejemplares de Cedros Canarios (Juniperus cedrus), endemismo macaronésico en peligro de extinción; por los alrededores hay dispersas a los lados del camino grandes rocas, ubicadas ahí debido a los desprendimientos de dicho risco. La imagen es espectacular, un gran valle bajo el Risco de las Pilas (2245 m.) y la Montaña de la Angostura (2382 m.), que se extiende entre multitud de Hierba Pajonera (Descurainia bourgaeana), Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus) y demás flora característica del Parque Nacional.


En las resbaladeras crecen Rosalillos y algunos Cedros Canarios.


Cañada de la Angostura.

A medida que avanzamos el camino da la sensación de que se estrecha y va ascendiendo muy suavemente entre los restos de un antiguo murete que delimita dicho recorrido, dejando detrás la Cañada de las Pilas y encontrándonos con la Cañada de la Angostura que está formada a su vez por dos pequeños llanos contiguos llamados la Cañada de la Panadería y la de El Escobonito, ambas resguardadas por los Monturrios de la Angostura, frentes de lava provenientes del Volcán de la Grieta (2126 m.), donde crecen grandes y aislados ejemplares de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius).


Panorámica de la Cañada de la Angostura
con el Roque de la Grieta al fondo.


Cañada de la Grieta.


La imagen del Roque de la Grieta (2502 m.) desde el camino es impresionante; es una elevación rocosa compuesta de una gran pared vertical que se eleva a más de trescientos metros de altura y que está situada justo al principio de la Cañada de la Grieta. El camino continúa con firme muy pedregoso desde una especie de atalaya donde la imagen de amplitud de dicha cañada se hace evidente, llamando la atención la línea recta que dibuja el recorrido a través de ella; por los bordes de la senda podremos observar numerosos restos de antiguos refugios de pastores entre grandes ejemplares de Retamas del Teide (Spartocytisus supranubius). Una vez hayamos rebasado la cañada, la imagen de Montaña Guajara (2718 m.) se hace cada vez más sugestiva; en las pendientes formadas de morreras que se desplazan bajo el circo rocoso hay multitud de poblaciones de Taginastes Rojos (Echium wildpretii), aunque hay que esperar a la primavera para verlos en floración.


Roque de la Grieta y Montaña Guajara (d).

Un tramo bastante pedregoso y zigzagueante discurre en suave ascenso, que da paso luego a otro más llano que transcurre en línea recta, entre las grandes paredes del circo de las cañadas a nuestra izquierda y el llamado Malpaís del Sanatorio al otro lado. La vista curiosa de un roque solitario de curiosas formas con uno especialmente en forma de monolito, nos da la bienvenida a la Cañada del Montón de Trigo, un extenso llano bajo Montaña Pasajirón (2529 m.) donde es habitual una pequeña laguna en temporada de lluvias. A la izquierda, antes de rebasar el Roque del Agua (2364 m.), que separa dicha cañada con la Cañada de la Mareta, situada bajo el Roque del Pino (2296 m.) y después de salvar un suave ascenso, encontraremos el cruce hacia la Degollada de Guajara, señalizada con un panel como la RUTA 5.


Montaña Guajara (2718 m.).


Roque del Agua (i); comienzo de la RUTA 5 (d).


Cañada del Montón de Trigo desde la RUTA 5.

Esta ruta tiene una trayecto de poco mas de un kilómetro por un estrecho, zigzagueante y pedregoso sendero entre multitud de Rosalillos de Cumbre (Pterocephalus lasiospermus) y retamas del Teide (Spartocytisus supranubius) con un desnivel bastante acusado que nos va dejando poco a poco unas vistas espectaculares de casi todo el valle que se extiende bajo las faldas del Teide (3718 m.). A mitad de camino el desnivel se suaviza considerablemente, y encontramos un lugar casi llano desde donde nos podremos regocijar de tan bello paisaje, llamándonos la atención a nuestra izquierda el Roque del Agua (2364 m.) que se alza nítido y majestuoso.


Camino de subida a la Degollada de Guajara (RUTA 5).

Luego el sendero gira bruscamente a la derecha y después vuelve a retornar a la izquierda pasando paralelamente y en suave ascenso bajo los riscos de la degollada, hasta que en un momento determinado nos encontremos a 2389 metros de altitud en el punto culminante del collado, donde hay un pequeño vivac resguardado por una Retama (Spartocytisus supranubius).


Vivac en la Degollada de Guajara (i);
RUTA 8 por las laderas de Montaña Pasajirón (d).
El Teide desde la RUTA 5.

Finaliza aquí la quinta etapa de este GR, en un lugar especialmente bello con una vista espectacular que desde pocos lugares se puede observar y que mas o menos se describe de la siguiente manera; teniendo el majestuoso Teide en frente que omnipresente se eleva a 3718 metros, me fijo a mi izquierda en Montaña Guajara (2718 m.), una inmensa mole rocosa cuyas resbaladeras se desplazan hacia la caldera principal pasando entre el Roque del Agua (2364 m.). La pista de Siete Cañadas (RUTA 4) se pierde mas allá del Roque del Pino (2296 m.) y la bifurcación con la RUTA 16 hacia El Sanatorio es evidente casi en su totalidad. También se distingue perfectamente Pico Viejo (3135 m.) y los frentes de lava de la cara oeste del Teide, con el Corredor de la Corbata. En el centro del inmenso valle pueden distinguirse las coladas de lava de Montaña Majua (2319 m.) junto al sendero del Sanatorio y Montaña de la Cruz (2259 m.), que juntas han cubierto una gran parte de dicho valle.
Montaña Blanca y Tabonal Negro.
Mas a la derecha podremos ver Montaña Blanca (2748 m.), acceso principal a la cima del Teide, que con su frente lávico ha formado el Tabonal Negro, un malpaís de color rojizo que se une en el fondo del valle, con el de las montañas citadas anteriormente; también destaca una erupción secundaria que ha formado El Culatón, mucho mas pequeña que las demás, pero que destaca por su forma espectacular, especialmente vista desde la carretera TF-24. Si seguimos más a la derecha distinguiremos también Montaña Rajada (2494 m.) que ha formado el Valle de las Piedras Arrancadas y mucho mas allá la cuerda de montañas que cierra el circo de las cañadas por el sur, como por ejemplo la Montaña de Arenas Negras (2346 m.) y Montaña del Cerrillar (2364 m.), bajo las cuales ya pasamos al empezar la ruta. Terminaremos por ver, sobre nuestras cabezas, Montaña Pasajirón (2529 m.) que es serpenteada por la RUTA 8 la llamada Ruta del Filo, que tiene aquí su final. Flanqueados por dos de las más altas cumbres de Tenerife y terminando otra etapa del GR-131, podemos disfrutar de las maravillas que nos ofrece la naturaleza en esta parte remota de la isla.


Panorámica desde la RUTA 5.


© Texto y fotografías de Francisco Fariña
francisco_farina@yahoo.es
http://franciscofarina.blogspot.com